La nostalgia no se va.
Me pregunto donde estarás, si estás bien incluso me pregunto si me echas de menos. Quizás tenga días en los que la nostalgia se apodere de mi corazón de tal manera que hasta me duela, o quizás es que nunca te llegaste a ir. A veces siento que idealizo demasiado, y que en realidad no fue para tanto, pero la nostalgia no se me va, y yo no sé como echarla de mi lado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario